La semana comenzó mal para la soja y el maíz.

El mercado de Chicago mostró bajas, a raíz del retiro de ganancias a resultas de las mejoras registradas en días anteriores.

A contrapelo de la expectativa general, el cuadro de precios quedó visiblemente en baja.

Una vez acentuada la crisis bélica en Medio Oriente, con el ataque de EE.UU. sobre las plantas nucleares en Irán, en lugar de elevarse, los precios de la soja y el maíz quedaron en pendiente negativa, por el revés sufrido por el valor del petróleo.

Se creía que el precio del petróleo se iba a disparar. Pero fue al revés.

El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) bajó este lunes algo más del 7 %, desde el cierre del viernes hasta USD 67,33 el barril, después del ataque iraní a una base estadounidense en Catar.

El gráfico ilustra muy bien la evolución desde el viernes al lunes.

El crudo Brent, a su vez, cayó casi 7,20 %, hasta situarse en 71,48 dólares al cierre del mercado de futuros de Londres. Todo lo contrario a lo aguardado.

El gráfico muestra el recorrido de los últimos días. Y la abrupta baja de este lunes.

¿Cómo es esto?

El mercado esperaba una durísima represalia iraní a EE.UU. que se daría mediante un bloqueo en el estrecho de Ormuz por donde transita cerca del 20% del crudo por mar. Este estrecho se constituye en la llave para una revancha.

No fue así como se dio. Es que cualquier bloqueo, no solo afecta a EE.UU. También lo hace sobre el propio Irán por sus exportaciones de petróleo.

Si bien el Parlamento iraní había solicitado el cierre del estrecho de Ormuz, no pasó nada, pues la decisión debe ser aprobada por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional.

La realidad es que no se puede asegurar nada al respecto.

Al responder únicamente sobre objetivos militares y no haber causado daños en la infraestructura energética ni en el suministro de crudo, los inversores dejaron de creer en una suba del precio de estos granos. Por ahora.
Pues todo puede variar de un momento a otro…